Según la Revista de Crítica Literaria Latinoamericana, Alegría merece ser considerado un clásico peruano, y es pertinente calificar a sus tres novelas iniciales y esenciales como textos canónicos de la literatura peruana, por tanto “clásicos” en el sentido más elemental de la palabra. El atributo de clásico resulta especialmente apropiado para el caso de El mundo es ancho y ajeno.
Se ha sostenido en no pocas ocasiones que Ciro Alegría es la muestra superlativa de la narración peruana, así como César Vallejo lo es a la poesía universal. Las obras de Ciro Alegría han constituido, desde su publicación, auténticos muestrarios de la riqueza literaria tanto a nivel formal como esencial, ensalzando así el nivel de la literatura peruana equiparándola al caso de la literatura inglesa, estadounidense o europea. Tal es el carácter clásico del autor del mundo es ancho y ajeno, que, aparte de los galardones obtenidos luego de la presentación de sus obras, era invitada a diversas universidades extranjeras a dictar cátedra sobre técnicas de narración (por ejemplo, cuando Alegría es invitado a Cuba). Y, por último, si se tuviera que definir la clásica obra de una autor, ésta, sería en Ciro Alegría: El mundo es ancho y ajeno, Los perros hambrientos y La serpiente de oro.